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El próximo paso de los investigadores es crear estrategias para fortalecer los tomates, como la introducción de antioxidantes.
Cuando la luz ultravioleta B (UVB) del sol incide sobre la piel, los humanos sintetizan vitamina D3. La principal fuente de esta vitamina para la mayoría de las personas es el pescado y los productos lácteos. Pero ahora se pueden encontrar en tomates genéticamente modificados, u organismos genéticamente modificados (OGM), como se les conoce, gracias a los científicos que lograron manipular el genoma de la fruta.
Todo el proceso se llevó a cabo sin alterar procesos biológicos importantes en la planta. Para lograr la hazaña, un consorcio mundial de investigadores del Reino Unido, Italia, Chile y Cuba desarrolló un método para aumentar los niveles de vitamina D cuando los tomates se exponen a la luz UVB (2). Fortificar los tomates con niveles más altos de 7-DHC (deshidrocolesterol) aumentará la ingesta dietética de vitamina D en todo el mundo.
“La gente tiende a pensar en los OGM como si tal vez estuviera involucrado el glifosato o algún tipo de dependencia química o algo así. Y aquí hay un gran ejemplo en el que nada de eso es cierto”, explican los científicos dirigidos por Cathie Martin.
El siguiente paso de los investigadores es idear estrategias para fortalecer los tomates, como la introducción de antioxidantes que se encuentran en los arándanos y las moras.
*Tomado de: https://www.agrolink.com.br/noticias/tomates-transgenicos-ganham-reforco-de-vitamina-d_474947.html
