Foto/ FAO
La suspensión del corredor seguro en el Mar Negro y los recientes ataques a la logística portuaria de Ucrania tiene y tendrá consecuencias en el mercado internacional de cereal, cuyos impactos ya están siendo ampliamente comentados…. pero ¿qué pasa con los fertilizantes?, ¿se podría ver una repetición de la situación en la primavera de 2022 cuando los precios de los fertilizantes subieron a niveles récord y amenazaron la seguridad alimentaria mundial?, se pregunta el Sistema de Información de los Mercados Agrarios de la FAO (AMIS).
El corredor seguro se estableció en julio de 2022 y ayudó a restaurar los flujos agrícolas, si bien, los datos oficiales muestran que las exportaciones de fertilizantes a través de esos puertos no se materializaron. Barcos y comerciantes evitaron el área debido a las limitaciones adicionales y los mayores riesgos. En consecuencia no se espera que la suspensión del corredor tenga un impacto inmediato para los mercados de fertilizantes.
Junto al acuerdo del corredor, se estableció un acuerdo para facilitar también la exportación de alimentos y fertilizantes rusos. La Federación Rusa fue el mayor exportador mundial de amoníaco en 2021, pero sus exportaciones se vieron gravemente afectadas desde que estalló la guerra en Ucrania. El principal oleoducto de amoníaco Toyatti-Odessa, que conectaba a los fabricantes rusos con el Mar Negro, primero estuvo inactivo y luego dañado. Aunque otros exportadores lograron cerrar la brecha de suministro y la demanda mundial cayó, se podría decir que el mercado del amoníaco seguirá siendo particularmente sensible a las crisis, ya que la suspensión de corredor retrasa cualquier posibilidad de restaurar las exportaciones rusas.
La situación es diferente para otros fertilizantes, señalan desde AMIS. Las exportaciones rusas de urea y fosfatos en realidad se aceleraron en 2022/2023 cuando los exportadores cambiaron la logística a través de puertos nacionales en el Mar Báltico, con precios internacionales históricamente altos, que cubrieron los costes de transporte adicionales. Las exportaciones de potasa también continuaron, aunque a un ritmo más lento debido a los desafíos para los envíos por ferrocarril y la menor demanda mundial de potasa. Sin embargo, es probable que la Federación Rusa mantenga su alta participación en el comercio mundial de potasa.
El fin del corredor confirma que las exportaciones de fertilizantes del Mar Negro no volverán a su “normalidad” anterior en el corto plazo. Pero el comercio global ha tenido tiempo de ajustarse desde el estallido de la guerra y se puede esperar que continúe asegurando suministros suficientes siempre que no ocurran nuevos problemas. AMIS cree que los precios de los fertilizantes reaccionaron poco a los acontecimientos recientes y continuaron una tendencia alcista que ya había comenzado en junio después de varios meses de caídas de precios. Todavía faltan meses para la próxima gran ronda de compras, y durante el último año los actores del mercado han desarrollado nuevas opciones logísticas y políticas para elegir. Sin embargo, los mercados de fertilizantes seguirán vigilando de cerca los desarrollos del Mar Negro.